jueves, 29 de mayo de 2014

Los farolillos que me alumbran


Hemos fundado nuestro paraíso
lejos de las leyes de los hombres,
justo donde nace este arco iris
que hemos atestiguado pro indiviso.

Allá donde no llegan los vientos del cierzo
y reina nuestro aclamado silencio
ajeno a las premuras del tiempo.

En estas afueras
donde solo hay lugar para lo auténtico,
es tu mirada caramelizada
la única embajada autorizada
para ir desabrochándome el alma.

Entonces hago acopio
de ternura desmedida
y arrojo la sal de mis besos
por la geometría de tu espalda.
Hasta conseguir llenar de farolillos
todo mi sistema coronario,
que andaba tristemente demolido
con la alegría por los tobillos
en la vanalidad de la palabra.

Vuelvo a descubrir el rocío
que andaba sellando su escondrijo
por entre la frialdad de los números
en la conocida asepsia
que habitaba todos los calendarios.

Y en el anemómetro de mis emociones
he atisbado la presidencia
que reside sin la menor indulgencia
en los síntomas de este antiguo vocabulario
reunido con soberana paciencia
para ser capaz de coincidir
en la conveniente conciencia.

Desde donde podamos abolir
firmemente las distancias
entre nuestros sueños más osados
para poder vivir
con la mayor elegancia
este amor que se alza enhiesto
como bandera que hace gala
de nuestra mayor confianza.

Así será capaz de fluir en mi piel
el escándalo de sentir tu presencia
como una mirada vestida de miel
que busca la ansiada clemencia
del despertar de mi adrenalina
recorriendo las lindes de este milagro
donde gobierna tu ternura sin medida.

Y nuestra pasión desbordante
al sentirnos protagonistas
de un amor inmaculado
que se mece en los columpios
que andan escribiendo la leyenda
de ser dos almas capaces de renacer
en nuestra preciada inocencia.

                                   josé ángel...)

domingo, 11 de mayo de 2014

Las raices que nos otorgan los días


Lejos de mí mismo,
inmóvil y silente...
Fuera del tiempo que habito 
bendigo tu luz resplandeciente.
 
 Me siento 
al borde de tu pensamiento,
Y en mi corazón... 
...te hago residente.
Para que resolvamos juntos 
cualquier inconveniente.
 
 Para que crezcan robustas
las raices que forjaron 
la convergencia y conveniencia
de nuestras energías coincidentes.
 
Con un lazo amable de dicha 
y un compromiso perpetuo
forjado con el fuego lento
que nos otorgan los días.
 
Nuestro amor eterno
tallado en la roca
con los golpes del viento 
que genera nuestra alegría.

                                   José ángel..)