que se reúne para ser corriente
con el agua clara de los manantiales.
Hay un sentir ufano
que anda desbrozando el caudal
para llegar a anegar de ternura
la desembocadura
de esta tempestad.
Hay un rumor por la alameda
que va sembrando de jazmines
las entrañas de los alguaciles
para que cese su rancia censura
y estalle tras su triste figura
el estrépito de nuestro verano.
Hay tanta gente alrededor
y un silencio tan sabio,
palabras que mueve la corriente
con su transitar efervescente
construyendo palacios.
Hay un cauce que nos lleva
y una serena lealtad
a prueba de naufragios,
hay tanto entusiasmo
en este deseo de navegar,
que se nos queda pequeño el mar
y necesitamos más espacio.
¡Ay corazón que te adentras en alta mar!
no temas las inclemencias del tiempo
ni el valor que nos otorga la distancia.
Agarra ese viento a favor
y no sueltes este timón,
porque nuestra embarcación
está bendecida por los rayos del sol
y se gobierna con la llama eterna
que surge del resplandor
que nos otorga la vida
al saber que existimos cuando nos soñamos
y que nos desvanecemos como por arte de magia
cada vez que se nos juntan los labios.
Josiño...)
La magia que todos buscamos.
ResponderEliminarA disfrutadla.
Gracias amigo, tan solo basta tener fe para descubrirla.
EliminarUn abrazo
Viva la magia de vuestros corazones y la magia de tus versos.
ResponderEliminarGracias amiga, un verdadero placer tu visita llena de alegría, te deseamos lo mejor.
EliminarUn fuerte abrazo
Invitas a navegar... jajaja
ResponderEliminarGracias por estar ahí.
y siempre un placer leerte y disfrutar de tus metáforas.
un fuerte abrazo
Gracias a ti por venir desde tu silencio
Eliminarpara chapotear en mis alegrías.
Un abrazo amiga
No sabes lo que me alegra leerte y saberte tan bien.
ResponderEliminarTe mereces esta felicidad que tienes.
Que dure muchos años, amigo.
Un abrazo enorme.
Muchas gracias Laura, por la visita y por tus deseos.
EliminarUn abrazo fuerte